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viernes, marzo 29, 2024
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Se demoran los anuncios económicos en medio de la crisis política del gabinete

El Presidente de la Nación tenía previsto realizar anuncios económicos este jueves pero todo se suspendió por la crisis política de su gabinete

El Presidente de la Nación, Alberto Fernández, enfrenta la crisis política más importante de su carrera luego de que Cristina Fernández le quite el apoyo y ordene a todos los suyos renunciar al gabinete. La tarde del miércoles fue un caos en la Casa Rosada con reuniones y llamados telefónicos para todos lados.

El justicialismo llega al poder gracias a una coalición que tiene tres partes fundamentales, por un lado Cristina Fernández, por otro Alberto Fernández y finalmente Sergio Massa. Las diferencias estaban marcadas desde el primer momento y a los pocos meses de gobierno Cristina ya le anticipó a los suyos sobre las diferencias y que no creía que se llegaría hasta el final del mandato sin una ruptura.

Las diferencias se fueron intensificando, y hubo momentos de enorme tirantez en el medio aunque se fueron apagando con los días. Pero la derrota estrepitosa de este domingo y un panorama sombrío para el gobierno, y sobre todo para una renovación del gobierno en 2023, hicieron estallar por el aire la paciencia del sector más cercano a Cristina, y de ella misma.

Tras la derrota, ese mismo domingo a la noche hubo una reunión entre Sergio Massa, Cristina y Máximo Kirchner con gente de Alberto Fernández, donde le plantearon los cambios necesarios. Lejos de aceptar la propuesta, Alberto decidió ir a distintos actos públicos -como si no hubiera pasado nada- y comenzó a operar con gobernadores e intendentes para resistir a los pedidos de cambios planteados el día de la derrota.

Esta situación hizo explotar a Cristina que ordenó a todos sus funcionarios presentar la renuncia y filtrar las presentaciones en los medios de comunicación para que Alberto sienta la presión directa y no tenga tiempo de reaccionar. Así fue como Wado de Pedro presentó la renuncia mediante una carta y la dio a conocer. A los pocos minutos medio gabinete había presentado la renuncia y apagaron los teléfonos.

Alberto Fernández recibió la información por parte de un asesor suyo y, cuentan en Casa Rosada, quedó helado. Decidió convocar de urgencia a todos los funcionarios que no habían presentado la renuncia -que son los del ala “albertista”- y los reunió en su despacho.

La orden de Santiago Cafiero fue la de realizar llamados telefónicos a todos los gobernadores, intendentes y gremios para conseguir un inmediato apoyo a su gestión. Así comenzaron a llegar los primeros mensajes vía twitter pero ninguno se animó a poner el rostro en los medios de comunicación.

En medio de la crisis apareció también la figura de Aníbal Fernández, quien fue convocado por el propio Alberto Fernández y se reunió a solas con él, mientras en otras oficinas los teléfonos no paraban de hacer llamados buscando acompañamiento.

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Aníbal salió de la reunión sin confirmar para qué lo llamó Alberto, pero resulta evidente que lo que buscaba el presidente era frenar la sangría que estaba viviendo su gabinete.

Por su parte el tercero de los miembros de este “triunvirato de poder”, Sergio Massa, decidió reunirse en el Congreso con Máximo Kirchner para intentar mediar en plena crisis, pero no logró mayores avances, por lo menos que hayan sido visibles hasta el momento.

Luego Massa convocó a los suyos y les pidió “no hacer declaraciones en los medios” para no levantar más la temperatura y además no hacer movimientos como renuncias o reuniones con cualquiera de los dos sectores en puja. “Estamos en el medio de una situación compleja, no seamos parte de la ruina, seamos parte de la solución, si es que hay”, les habría dicho Massa a los funcionarios de su sector.

Hasta el momento ninguno de los sectores en puja han conseguido apoyos desde las cámaras de Diputados y Senadores, y se espera que eso pueda ocurrir en la jornada de hoy, fundamentalmente previo a la marcha convocada por el Movimiento Evita.

Este movimiento social, de enorme representación territorial en todo el país, busca posicionarse en el gobierno de Alberto Fernández, incluso a riesgo de perder el posible apoyo de Cristina Fernández y enfrentarse en las bases con los militantes que la tienen como la principal líder política.

La marcha será esta tarde en Plaza de Mayo y la expectativa de “los albertos” es que sea masiva pero no pueden garantizarlo del todo. “Gente va a haber, no se si tanta como necesitamos”, reconocen en los pasillos de Casa Rosada.

La crisis política que vive el gabinete finalmente demoró los anuncios que estaban previstos realizarse este jueves por la mañana junto a la presentación del Presupuesto 2022. Finalmente el proyecto de “ley de leyes” fue enviado en la noche del miércoles y desde el gobierno ya no tienen en agenda la presentación de los anuncios.

Alberto espera solucionar la crisis o cuanto menos que baje la marea y recién después de eso realizará los anuncios, sobre todo porque necesita un fuerte respaldo político para poder enfrentar las consecuencias si las medidas no resultan antes de llegar a las generales de noviembre.

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