La crisis sanitario-económica desatada por el coronavirus ha tensado al máximo las relaciones entre Pekín y Washington. Antes del estallido de la pandemia por el Covid19 se había firmado un acuerdo que ponía fin a meses de una escalada en la que chocaban las dos grandes economías del mundo. Ahora aquello queda en el recuerdo y desde Pekín se advierten que se está a un paso de un escenario que en China califican de Guerra Fría.
“China y Estados Unidos están al borde una nueva Guerra Fría”, avisa el ministro chino de Asuntos Extranjeros, Wang Yi. Pekín traza un escenario que compara con lo vivido después de la II Guerra Mundial entre el bloque capitalista, liderado por Estados Unidos, y el comunista, con la Unión Soviética la frente.
“Este virus político aprovecha todas las oportunidades para atacar y difamar a China. Algunas fuerzas políticas estadounidenses toman de rehenes las relaciones entre China y Estados Unidos y empujan a nuestros dos países al borde de una nueva Guerra Fría”, asegura Yi. Una respuesta a las acusaciones que lanza Trump cada vez que aparece en público.
Estados Unidos mantiene la postura más radical, pero no la única, a la hora de reclamar responsabilidades a China por una crisis sanitaria que roza los 5,5 millones de personas.