En el día de la patria, el Papa Francisco confirmó hoy 25 de mayo, su intención de viajar a la Argentina el próximo año.
Será la primera vez que Jorge Mario Bergoglio regrese a su país natal como Papa: “La idea es el año que viene, vamos a ver si se puede”, respondió Francisco, refiriéndose al 2024, ante la pregunta que le hicieron los participantes de la comunidad de Scholas Occurrentes cuando participaban en el Vaticano de la inauguración de la nueva sede del CBC de la Universidad de Buenos Aires (UBA) que funciona en la comunidad de Scholas del Barrio Mugica, en Buenos Aires.
En el evento, el Papa bendijo a la Casa de Altos Estudios y dialogó con jóvenes conectado en simultáneo con Buenos Aires a través de Internet.
El regreso de Bergoglio a Buenos Aires después de 11 años podría ser después de Semana Santa, el cual lo está planificando con hermetismo en los más mínimos detalles la Santa Sede. Viaje apostólico al Cono Sur que incluiría también Uruguay y Brasil.
El futuro viaje a Buenos Aires fue la primera pregunta que le realizaron al Papa los jóvenes que participaron del cierre del evento “Ciudades Eco-Educativas”, organizado por Scholas Occurrentes que hoy celebraba sus 10 años como Movimiento Internacional originado por Francisco con la misión de consolidar los lazos de solidaridad y colaboración entre los jóvenes.
De regalo la camiseta de Maradona
En un encuentro donde se hablaba español y los colores albicelestes se apoderaban de la escena, el presidente del Nápoles Aurelio De Laurentiis, la selección campeona de Italia del tercer “Scudetto” obsequió al Pontífice dos camisetas con el número 10, que usó Maradona en los tiempos de gloria.
Al entregarle los regalos al Papa, De Laurentiis le dijo: “Aquí hay dos camisetas con el número 10 porque Usted es el número 10 de la Iglesia, la sustitución de Maradona en la jerga futbolística”.
Continuando con los obsequios y refiriéndose a la lucha social del Papa, De Laurentiis le entregó el pie idéntico con el peso y las medidas de Maradona realizado en oro “que yo se lo regalo para patear todas las injusticias del mundo porque Usted siempre está presente en esa lucha”, y concluyó con un desafío provocador: “No puedo pedirle que venga a plantar un olivo en el Estadio Maradona, pero de verdad espero poder jugar un partido en Nápoles con el equipo de su corazón, Argentina”.