El brutal femicida de la adolescente mendocina es inimputable: los motivos

La conmoción sigue siendo alta en Mendoza a dos días de conocerse el femicidio de la adolescente Lucía Fernández en la localidad de Maipú. El hecho se resolvió tan sólo 24 horas después de hallarse el cadáver de la chica de 15 años: en ese tiempo, los vecinos señalaron ante el personal policial a quien era el principal sospechoso, el mismo joven que luego confesaría el crimen mientras era entrevistado miembros de la fuerza.

Lo que ahora ahonda más la angustia de los familiares de Lucía es que el confeso asesino no irá preso ni tendrá ningún cargo, según explicaron expertos penalistas, por ser menor de 16 años (tiene 14). Tal y como relata el especialista en derechos de menores Ramiro Villalba, el femicida no tiene la suficiente “madurez para comprender la criminalidad del acto”.

“En la legislación actual hasta los 15 años inclusive los sujetos son inimputables entonces no se les puede aplicar una sanción penal. El fundamento de esto, que puede ser debatible, es que estamos ante una personalidad en desarrollo que no ha logrado un grado de madurez para comprender la criminalidad del acto y poder aplicarle una condena. Está todo dirigido desde la mirada del menor que cometió el delito. Yo se les digo a los padres de la chica asesinada y se quedan con un gusto amargo”, explicó el letrado en declaraciones a Te digo lo que pienso, que conduce Ricardo Montacuto por Radio Nihuil.

Sobre por qué la ley no ha sido modificada, Villalba contó que “hay miles de proyectos para bajar la edad de imputabilidad. Es una tentación de la política para modificarla. Siempre que pasan estos casos aparecen estos proyectos”.

La ley penal y los Derechos del Niño

El penalista expresó cómo es el mecanismo para estos casos, por más aberrantes que sean los crímenes: “La ley penal presume que no entiende o no comprende sus actos a esa edad. Es una presunción legal. Se adopta un proceso tutelar y se busca las causas por las que el menor cometió este delito y  tratar de erradicarla porque se entiende que se puede actuar para que no vuelva a reincidir. Es distinto cuando tienen 18 años en donde si lo comprenden”.

Por otra parte, indicó algunos de los obstáculos que impiden que se avance con la modificación: “No olvidemos que estamos adheridos a la legislación de los Derechos del Niño que condiciona esta legislación y un trato de protección integral a la niñez y a la infancia”.

Finalmente, el abogado fue consultado sobre las diferencias de entre un niño de años en la actualidad y uno tiempos atrás: “Es opinable. Puede ser que un niño de 15 años muchos años atrás sepa que estaba mal matar y uno ahora no. Dependiendo del caso concreto, siempre hay que analizarlo”.