Gustavo Cuello realizaba su recorrido nocturno como cada día en la región urbana de Córdoba. Por circunstancias que aún se investigan, cuando circulaba por la zona de Villa Boedo, el colectivero habría sido brutalmente asesinado.
Por el hecho y manifestando estar cansados de la falta de seguridad en el rubro, choferes cordobeses -apoyados por la UTA Córdoba- realizaron un cese de actividades y realizaron una masiva protesta en punta de línea, en Camino San Carlos, al extremo sur de la Capital.
El fallecido conductor de 43 años se desempeñaba en la empresa Ersa y era padre de dos hijos, de 12 y 17 años.
El hombre habría sido encontrado por un compañero, quien vio el colectivo despistado al costado de la ruta y se acercó a ver que había pasado. Cuando llego se encontró con la escalofriante escena.
El parte oficial de la Policía de Córdoba indicó los detalles de su hallazgo: “Personal policial se constituyó en Colectora (zona de Bº Villa Boedo) donde se encontraba el cuerpo de un hombre mayor de edad sobre la carpeta asfáltica y, a unos 50 metros, se hallaba una unidad de colectivo línea 71 de empresa Ersa. Luego se hizo presente personal de un servicio de emergencias que constató el deceso. Se investigan las circunstancias en que se produjo el fallecimiento. Tomó conocimiento e intervención la Fiscalía del Distrito II Turno 3″.
Por el momento se caratuló como una muerte dudosa y el fiscal de la causa, Tomás Casas, espera el resultado de la autopsia para determinar la mecánica de la muerte. Según indicaron periodistas locales, “tenía cortes en brazos y la cabeza destrozada” e investigan si lo habrían arrollado con un vehículo.
En horas de la madrugada, los compañeros del chofer fallecido interrumpieron la circulación de la avenida O’Higgins, en la zona cercana a Circunvalación, donde está la punta de línea de Ersa.
Con información de Flavia Fochesato.