A principios del mes de septiembre del año 2013 dos padres denunciaron al profesor de música Marcos Ledesma por abuso sexual y corrupción de menores, fue a partir de los dichos espontáneos de una niña: “Marcos me mete el dedito en la cola de atrás” le contó A.F de 4 años a su mamá. Le pequeña asistía al Jardin 914 del barrio La Loma ubicado en 22 y 42 de La Plata.
Ante esto la mujer quedó desencajada y se comunicó con otra madre explicándole lo que había escuchado de boca de su propia hija. Los denunciantes no necesitaron nada más para recurrir a la justicia. El caso fue tomado por el entonces fiscal en turno, Álvaro Garganta a cargo de la UFI 11 de la capital bonaerense, luego de reunirse con directivos y padres, el funcionario judicial ordenó pericias y la realización de entrevistas en Cámara Gesell para 11 niños, en tanto la jueza de Garantías del juzgado penal 5 Marcela Garmendia autorizó una orden de registro en la vivienda del acusado, con estos elementos se iniciaba una causa penal que al día de hoy sigue sumando fojas.
“Los testimonios y los dibujos que hicieron los chicos y que obran en el expediente son coincidentes entre sí. Es imposible creer que niños de 4 y 5 años puedan complotarse y contar lo mismo una y otra vez”, resaltó la abogada Andrea Reynoso quien junto al Abogado Matías Pietra Sanz llevan una parte de la acusación particular.
La investigación del fiscal en instrucción se extendió por tres años y tres meses, aún le cuestionan un allanamiento tardío en la casa del imputado y falencias en ese procedimiento: “No se llevó la ropa interior de Ledesma y era algo importante porque los chicos hacen descripciones de eso en sus declaraciones, dan detalles salientes”, contó Natalia Paniagua, una de las primeras madres que con nombre y apellido sigue pidiendo justicia y condena para el docente de música.
Los tiempos de la “justicia”
De 2013 a la fecha, Marcos Ledesma estuvo tras las rejas durante 5 meses y 17 días, permaneció alojado en la Alcaidía Roberto Petinatto de Olmos, tuvo prisión domiciliaria durante 2 años y 3 meses lo que significa que en total pasó 2 años y 17 días “privado de su libertad”, hoy es un ciudadano y vecino de a pie que puede incluso cruzarse en cualquier momento o lugar con alguna de las víctimas. Actualmente trabaja en área de sumarios de la Dirección de General de Escuelas de la Provincia de Buenos Aires, el gremio docente UDOCBA al que está afiliado lo respalda y pide por su inocencia pero la prueba en su contra es abundante a punto tal que los planteos a favor del docente son de índole procesal: “Discuten sobre plazas y llevan las quejas al terreno del derecho pero no de los hechos”, agregaron los denunciantes.
El expediente tiene 11 cuerpos sin contar los anexos documentales con los que completaría un total de 23 cuerpos (200 fojas c/u).
Ya se cumplió más de una década de iniciado el caso y las presuntas víctimas irán al juicio con 15 y 16 años, es decir siendo adolescentes. El Tribunal Oral y Criminal V de La Plata presidido por Carmen Rosa Palacios Arias es el que tiene la causa a cargo. Ya le notificó las partes que el juicio comenzará entre el 12 de agosto y el 23 de septiembre del año 2024. En todo este tiempo Ledesma pasó por 5 abogados defensores. Todos intentaron la misma estrategia: Estirar los plazos y “ganar tiempo”, hasta ahora lo lograron. ¿Y los chicos?
Secuelas: pesadillas, pis en la cama, alimentos prohibidos y temor a Papá Noel
“Mi hija tiene pesadillas y sueña con el profesor Marcos, a veces con las clases de música y los episodios son reiterados”, cuenta Paniagua, también agregó que está en comunicación con otros padres que denunciaron a Ledesma, sus hijos tienen los mismos inconvenientes para conciliar el sueño y las secuelas se extienden a otros hábitos cotidianos.
Las consecuencias de los abusos han hecho que algunas niñas no consuman lácteos ni pescados, en uno de los casos que obra en la causa se explica que “…. la menor xxxxx no consume pescado porque le recuerda al olor del profesor”.
Pero una de las secuelas que más se destaca es la que tiene la menor cuyo nombre comienza con Y. La niña le teme a Papa Noel y a todo lo que se deriva de ese personaje (renos, regalos, el traje rojo con barba, etc) . El por qué de esa conducta radica en que según los mismos dichos de ella y de sus compañeros, muchos de los abusos ocurrían en el interior “la casa navideña que el profesor Marcos tenia en el salón de clases y era allí a dónde llevaba a sus alumnos favoritos”, relata una madre a este medio.
Estos son algunos de los tantos elementos probatorios que obran en un frondoso expediente judicial y que aún no tiene una resolución por parte de la justicia, mientras los niños y los padres solicitan un juicio cuanto antes, del otro lado la defensa del acusado sigue abonando a la estrategia de “estirar plazos y ganar tiempo”, del mismo modo en el que solo ataca y cuestiona temas procesales.
Mientras los tiempos se extienden la justicia no llega y el profesor Marcos Ledesma hace tiempo que en La Plata ya puede cruzarse con quienes lo denunciaron o bien con sus ex alumnos y alumnas.