Ramón Edgardo Montoya, oficial de la Policía Local de Lomas de Zamora, fue encontrado asesinado a balazos en un descampado de Avellaneda, junto a un amigo con antecedentes penales que también fue baleado y quedó internado en un hospital.
La fiscal que investiga el crimen, Natalia Milione, espera la evolución del estado de salud del amigo de la víctima para tomarle declaración y poder avanzar con la pesquisa, informaron hoy fuentes judiciales.
“Hay varias hipótesis (sobre el móvil del hecho) pero ninguna confirmada hasta el momento”, dijo esta tarde un investigador con acceso al expediente.
El herido, identificado por la Justicia como Nahuel Maximiliano Colombres (24) y quien tenía antecedentes penales, fue operado en el Hospital Interzonal General de Agudos Presidente Perón de Avellaneda y esta mañana evolucionaba favorablemente.
Esta declaración podría ser clave para poder avanzar con el esclarecimiento del asesinato de Montoya, quien se desempeñaba como oficial de la Unidad de Policía de Prevención Local (UPPL) de Lomas de Zamora.
El hecho se produjo el viernes pasado alrededor de las 20, en un terreno ubicado en la esquina de las calles Juan B. Justo y Las Glicinas, en la localidad de Villa Domínico, Avellaneda.
Voceros judiciales informaron que una persona que vive en cercanías del descampado, en las inmediaciones del canal Santo Domingo, advirtió la presencia de dos hombres baleados que yacían en el suelo, por lo que de inmediato se comunicó con el teléfono de emergencias 911.
A los pocos minutos llegaron efectivos del Comando Patrulla de Avellaneda, quienes constataron el fallecimiento del policía Montoya y encontraron a pocos metros del cadáver a Colombres, quien también tenía múltiples heridas de arma de fuego.
Aún no se conocía el resultado de la operación de autopsia al cuerpo de Montoya, pero de acuerdo a los peritos que trabajaron en la escena del crimen, el policía y su amigo recibieron alrededor de 15 disparos.