Bajo una actuación de “oficio urgente”, el Auditor Sumarial de la Auditoría General de Asuntos Internos del ministerio de Seguridad bonaerense se dirigió al comisario General Juan Galeano para informarle el inmediato pase a disponibilidad de los efectivos identificados como participantes de la manifestación en las puertas de la Quinta de Olivos en septiembre pasado.
En total, Darío Ricardo Díaz señaló a 400 efectivos, los cuales son desafectados a partir de este instante y enviados a sus domicilios. A quienes se encontraban en servicio se les sustrajo el arma reglamentaria y el chaleco y se los notificó de la resolución.
Los hechos ocurrieron durante los días 9 y 10 de septiembre de 2020, cuando un gran número de policías bonaerenses hizo cese de actividades y se manifestó frente a la Quinta Presidencial de Olivos pidiendo un aumento salarial y mejoras laborales. En su momento, incluso desde la oposición se expresó el rechazo a la medida adoptada: “No es el lugar. No se puede poner en jaque las instituciones democráticas. Es inaceptable”, había dicho Mario Negri.