La nueva conferencia de prensa del presidente de la Nación, Alberto Fernández, dejó mucha tela para cortar. La política se adueñó del escenario, la sala de conferencias de la Residencia de Olivos, más allá de la foto de la que ya se hizo mención en Opinión Frontal, donde comulgan, además del Presidente, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof. Y nuevamente fue el ex ministro de Economía, esta vez más enfáticamente, quien movió la primera ficha y generó una ola de críticas por parte de referentes de Juntos por el Cambio.
Durante varios tramos de su larga exposición, Kicillof hizo hincapié en el estado de “abandono” en que recibió la Provincia, en clara alusión a María Eugenia Vidal. “Vinimos a poner a la Argentina de pie”, dijo al pasar, luego de hacer referencia al estado de los hospitales, de las terapias intensivas y de otras situaciones con las que se encontró al asumir.
El primero en reaccionar fue el intendente de Vicente López, y hoy uno de los jefes comunales más cercanos a Vidal, Jorge Macri, quien en sus redes expresó: “El gobernador no conoció como estaba la Provincia antes de @mariuvidal. Antes del SAME, antes de todas las Guardias hechas a nuevo, varios hospitales renovados. El mundo no empieza cuando uno llega…” El primo del ex presidente aprovechó para reclamarle a Kicillof: “Gobernador, el virus contagia tanto en un Hipermercado como en un comercio de barrio. Deje a los comercios barriales subsistir vendiendo los mismos rubros que vende un Hiper!”
Rápidamente, la ministra de Gobierno de Kicillof, María Teresa García, recogió el guante y le respondió a Jorge Macri. “Es verdad, el mundo no empieza cuando uno llega, pero cuando uno llega y encuentra ambulancias oxidadas, vacunas vencidas, chicos sin vacunar, bebés boleados a mano por falta de grupo electrógeno, tenemos la obligación de cambiar el abandono”.
Por su parte, el diputado nacional y ex ministro de Seguridad de Vidal, Cristian Ritondo, sostuvo que “es una pena que una vez más el gobernador Axel Kicillof utilice una conferencia de prensa informativa y de salud en medio de una crisis aguda y la transforme en una charla de campaña”. Agregó que “durante la gestión de María Eugenia Vidal hicimos foco en las guardias, que son el corazón de los hospitales públicos y donde se atienden 7 millones de personas cada año. Llevamos el SAME a 119 distritos, beneficiando a 13.700.000 vecinos”.
En tanto, la diputada nacional Graciela Ocaña dijo que “la gestión de Vidal recibió 53 hospitales con serios problemas edilicios, 4 con riesgo de derrumbe. En 4 años reparó todas las guardias de los hospitales y llevó el SAME a toda la Provincia. El peronismo gobernó gran parte de los últimos 200 años de la Provincia”. Otra representante de la Cámara baja del Congreso, Marcela Campagnoli (Coalición Cívica ARI-Cambiemos), puntualizó: “Cuando Axel Kicillof habla de herencia recibida, se refiere a los 8 años de Scioli, los de Felipe Solá, los de Ruckauf o los de Duhalde. Avísenle que María Eugenia Vidal estuvo solo 4 de los 36 años de democracia, porque Axel nunca fue bueno para las cuentas y tal vez por eso la pifió. Memoria!!!
Su par provincial, Carolina Píparo también incluyó a Alberto Fernández en sus críticas. “El presidente y el gobernador hablando de problemas estructurales y del “modelo de país” que quieren, ambos parte de una gestión que gobernó 12 de los últimos 16 años! Se terminó la campaña, dejen el relato que ya no funciona y háganse cargo”.
Pero cerca de la medianoche, la que prendió la mecha fue la ex ministra de Seguridad nacional y actual presidenta del PRO, Patricia Bullrich (sigue directivas de Mauricio Macri y representa su ala dura), quien se refirió duramente a Alberto Fernández. “Presidente: su cinismo no está a la altura de su responsabilidad. Mañana discutamos si la cuarentena sirvió o no. Pero hoy, en nombre del 41% de los argentinos, le pido respeto a usted y al gobernador. No vamos a dejar que usted ni nadie nos insulte”.
Más allá de los comentarios, las caras adustas y los gestos de incomodidad de Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta –quienes se cruzaron humoradas en la conferencia- mientras se explayaba Kicillof, fueron indisimulables.