Estos libros son ideales para los que disfrutan de escuchar música tanto como de leer.
En las bateas literarias y recién salido del horno, tenemos la llegada de un nuevo Murakami, lo que es en sí mismo, un motivo de celebración. Para quienes no lo conocen es un autor japonés que logra equilibrar la maestría literaria y el boom de ventas. Fue reiteradamente candidato al Nobel y con justa razón. En esta oportunidad Tusquets nos trae “Música, sólo música”. En sus páginas vamos a encontrar un largo intercambio que tuvo Murakami con Seiji Ozawa, uno de los directores de orquesta más sobresalientes de la actualidad (lleva más de 50 años sobre los escenarios de todo el mundo).
Tal vez lo primero que pensemos es que no conocemos nada de música clásica. O que no nos gusta. Puede pasar. Sin embargo, encuentro en este libro una lectura mucho más amplia que para los amantes de la música puede ser de gran utilidad para entender los pormenores de este mundo artístico. Murakami mismo se reconoce melómano pero falto total de conocimiento técnico. Eso hace que nosotros como lectores, podamos descubrir con el mismo asombro que el autor, mucho de los detalles que enseña con maestría Ozawa. Si te gusta el jazz, la ópera y lo clásico este es tu camino. Y claro, si te gusta Murakami, es un libro sin discusión.
Pero si acaso querés leer una novela, y siguiendo la línea asiática, (¡me pregunto qué conexión milenaria ata especialmente a los asiáticos con la música!) , hace muy pocos meses salió a la venta por Edhasa “Alma partida” de Akira Mizubayashi , una autor en este caso, franco-japonés. Esta novela está atravesada por la música como símbolo del perdón y de la indulgencia. Pero sobre todo del perdón incluso ante el más doloroso de los errores.
Se sitúa en el Japón de 1938 cuando este país encausa una guerra para expandirse por Asia. Mientras esto se sucede, la música clásica embelesa a cuatro jóvenes que se reúnen a escondidas del régimen para tocar con pasión y premura. Sin embargo una de esas noches la sesión se interrumpe por una patrulla militar que los lleva para siempre pero que, extrañamente, le perdonan la vida a uno de los hijos de ellos. El único recuerdo que queda es un violín que será para este hijo un símbolo. Muchos años después, radicado ya en París y esta vez como lutier, este violín lo llevará de vuelta a Japón para cerrar y sanar este círculo. Es un libro lleno de redención que nos lleva a pensar que a veces, el horror puede ser corregido y sanado por el arte.
Dejando de lado el lazo asiático, recomendamos un no-ficción para rockearla. Aunque es sólo una excusa para recomendar una editorial entera. “Letristas” de Alejandro Güerri y Federico Merea es un libro que se publicó en 2015 por la editorial Gourmet Musical. No es una novedad pero es un destacado: es la posibilidad de leer –casi textualmente diría- a aquellos protagonistas que han escrito alguna de las letras más importantes de nuestra música nacional, con especial énfasis en el rock.
El libro es una recopilación de entrevistas. Prácticamente no tiene injerencia de los autores, lo que nos deja “leer” el tono y lenguaje de cada uno de los entrevistados. Entre ellos Adrián Dargelos, Ale Sergi, Paz Martínez Pablo Lescano o Jorge Serrano son alguno de los citados.
Traigo este libro a colación por fuera de las novedades editoriales para recomendarles a Gourmet Musical en su totalidad. Allí van a encontrar asidero los amantes de la lectura y de la música toda: libros que van desde el rock al jazz, pasando por libros más académicos e incluso con algo de humor y criollismo – acaban de publicar “¡Canten putos!” la historia de los cantitos de cancha- por ejemplo. Para todos los gustos y todos los estilos esta editorial argentina nos ayuda a combinar dos pasiones culturales: las letras y la música.
