El capitán de la Selección argentina Lionel Messi organizó una megafiesta en el complejo City Center de Rosario para despedir el año junto a sus amistades y revolucionó una vez más a la ciudad santafesina.
Si bien no hubo un anuncio oficial del evento, un integrante de la logística del mismo confió: “La fiesta es meramente familiar del entorno de Lionel Messi. Hay tres grupo musicales: Los Palmeras, La Mosca y La K’onga. También en el listado hay varios jugadores y amigos que vienen a cerrar el año con el campeón del mundo”.
Lo cierto es que desde temprano muchos hinchas albicelestes comenzaron a rodear el complejo a la espera de los invitados y la llegada de Messi.
Seis aviones privados llegaron al aeropuerto Islas Malvinas, de Fisherton, con varios invitados. Algunos de ellos serían Marcelo Tinelli, Sergio Agüero, Claudio “Chiqui” Tapia y Leandro Paredes.
Con el correr de las horas, las inmediaciones del Casino comenzaron a ser invadidas por personas que no querían dejar pasar la chance de ver a Messi. De a poco, fueron aparecieron varios simpatizantes con la camiseta de Argentina con el 10 en la espalda.
Uno de los primeros en llegar fue Maximiliano Rodríguez, quien arribó minutos antes de las 21 y fue abordado tanto por la prensa apostada en el lugar como por los hinchas que lograron su primera “captura”.
Apenas pasadas las 21:15, cientos de hinchas se abalanzaron sobre el vehículo de Messi y le impidieron el paso, pero el capitán de la Selección argentina se mostró tranquilo y paciente al volante, con una sonriente Antonela en el asiento del acompañante y los hijos de ambos en el asiento trasero.Minutos más tarde llegó Ángel Di María, ya con el camino más despejado después del ingreso de Messi. //NA