En una dinámica económica post festividades, en el Mercado de Cañuelas se han experimentado notables disminuciones en los precios de la hacienda durante la última semana. Esta tendencia se atribuye a la baja en el consumo que se ha manifestado después de las celebraciones navideñas y de fin de año.
En un punto culminante durante la cuarta semana de diciembre, el valor del ganado en pie alcanzó los $1.900 por kilogramo. Sin embargo, en la semana actual, estos precios han retrocedido a niveles de $1.400 por kilo, marcando una considerable variación en un corto período.
Las carnicerías, actores clave en la cadena comercial, anticipan que el impacto de esta disminución se hará evidente en sus establecimientos durante la presente semana. Este ajuste de precios refleja la sensibilidad del mercado cárnico frente a factores como la variación en la demanda y las condiciones económicas.
Previo a este ajuste, cabe recordar que la devaluación y el aumento del 118% en el dólar oficial llevaron el precio máximo promedio de la carne a los $1.900 pesos, generando repercusiones inmediatas en los precios finales para los consumidores. Las carnicerías llegaron a vender el kilo de asado en torno a los $8.000.
Los informes del INDEC señalan que la inflación de alimentos fue del 29,5% mensual en diciembre, mientras que el ítem de carnes experimentó un aumento promedio del 36%. Por categoría, el kilo de asado aumentó un 43%, equivalente a $5.195,96, mientras que la carne picada, la paleta, el cuadril y la nalga también registraron aumentos significativos.
A partir de enero, tras las festividades, se ha observado una desaceleración en los precios de las carnes, probablemente influenciada por la disminución en la demanda post celebraciones.
Según el Instituto Argentino de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), se ha registrado un aumento promedio del 40,9% en los precios de carnicerías y supermercados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) con respecto a noviembre, con una variación interanual del 307,3%. Las subas más notorias se han observado en la falda, el asado y el matambre.
En las cadenas de supermercados, se aprecia una tendencia a la baja desde el inicio del mes. Los principales hipermercados reportaron un aumento del 4,4% en los precios de la carne durante la primera semana de enero. Sin embargo, se evidencia una desaceleración significativa, llegando al 0,31% en la segunda semana.
En tanto, el sector ganadero se recupera tras el impacto de la sequía histórica. De todas formas, se espera que los sectores industriales y comerciales experimenten una disminución en el consumo interno, la producción y las exportaciones.