En la etapa final de la campaña hacia las elecciones primarias, la capital provincial de La Plata se ve envuelta en una creciente tensión política. El municipio denunció actos vandálicos contra la cartelería política del intendente Julio Garro, donde se recopilaron videos que muestran cómo un grupo de punteros políticos y militantes atacan con un lanzallamas un cartel ubicado en ruta 36 y 520.
Ante este hecho preocupante, el municipio expresó su inquietud sobre la violencia que se ha generado por parte de varios sectores políticos a pocos días de las elecciones.
La Justicia bonaerense ya está tramitando la causa y cuenta con pruebas que señalan el ataque contra la cartelería política de Juntos por el Cambio y otros espacios opositores en la ciudad. En sus denuncias, responsabilizan al actual gobernador Axel Kicillof y al ministro de Justicia, Julio Alak.
Julio Garro, el intendente afectado por los actos vandálicos, se pronunció al respecto: “Es un hecho lamentable, creo que el fortalecimiento de la democracia debe primar por sobre todas las cosas y que sea la sociedad quien elija quiénes deben seguir gobernando el país, la provincia y nuestra ciudad. Pero es clave que la dirigencia política esté a la altura y evite las agresiones”.
Asimismo, Garro hizo un llamado a la unidad y a trabajar juntos para superar la crisis, dejando de lado las agresiones y discusiones sin sentido que dañan a la sociedad.
El juez con competencia electoral Alejo Ramos Padilla intervino en el caso y solicitó al Centro de Monitoreo de La Plata la entrega de filmaciones de unas 30 zonas de la capital provincial donde Unión por la Patria denunció actos de vandalismo contra su cartelería.
En La Plata, la lucha por el espacio público es intensa, con 27 candidatos a intendente. Garro se enfrenta en la interna con Juan Pablo Allan, el candidato de Patricia Bullrich.
El peronismo también atraviesa tensiones, con la candidatura de Julio Alak sin consenso y desafiada por otros cuatro candidatos en la interna de Unión por la Patria.
La situación en La Plata sigue siendo motivo de preocupación, y la sociedad espera una resolución pacífica y democrática en las próximas elecciones primarias.