El diputado de La Libertad Avanza, Javier Milei, ha generado controversia al declarar que si es elegido Presidente, avanzará en la eliminación del carácter obligatorio de la educación en Argentina. En una entrevista radial, el economista argumentó que la obligatoriedad es una forma de controlar a los seres humanos e imponerles un patrón moral, y que en su lugar, se debería implementar un sistema en el que aquellos que deseen estudiar puedan hacerlo a través de un vaucher.
Sin embargo, la obligatoriedad de la educación ha sido fundamental en el acceso a la educación de todos los ciudadanos. La obligatoriedad garantiza que todos los niños tengan la oportunidad de asistir a la escuela y recibir educación, independientemente de su origen social o económico. La educación es un derecho humano fundamental, y su obligatoriedad es esencial para garantizar que se cumpla este derecho para todos los niños.
Milei también cuestionó la gratuidad de la educación, afirmando que alguien siempre paga por ella, en referencia a los impuestos. No obstante, la educación gratuita es otra medida que se ha implementado en muchos países para garantizar el acceso a la educación de todos los ciudadanos, independientemente de su capacidad económica.
El economista también se refirió al tema de la dolarización y la inflación, afirmando que el país necesita un recorte del gasto público para reducir la inflación, y que la dolarización es una alternativa viable en caso de una posible hiperinflación. No obstante, es importante destacar que la dolarización no es una solución mágica para la inflación y que tiene sus propios riesgos y desventajas.
En resumen, aunque Milei tiene puntos de vista interesantes sobre la economía, la eliminación de la obligatoriedad de la educación no es una solución viable para mejorar la educación en Argentina. La obligatoriedad ha sido fundamental para garantizar el acceso a la educación para todos los ciudadanos, y su eliminación solo empeoraría la situación actual de la educación en el país.