En respuesta a las políticas presupuestarias del gobierno de Javier Milei, estudiantes, docentes, sindicatos, legisladores y líderes de la oposición se unen en la Marcha Federal Universitaria, una manifestación masiva que destaca la importancia de la universidad pública en Argentina y exige un aumento en el financiamiento para garantizar su continuidad.
La convocatoria, liderada por la comunidad educativa, surge en medio de las crecientes dificultades presupuestarias que enfrentan las instituciones académicas en todo el país. El ajuste propuesto amenaza con poner en peligro el sistema educativo público, afectando a miles de estudiantes y docentes.
Ante esta situación, se han llevado a cabo una serie de acciones previas, como clases públicas y abrazos simbólicos a las instituciones, como muestra de solidaridad y resistencia. La movilización central está programada para el martes a las 15:30 en Plaza de Mayo, donde se espera una participación multitudinaria.
La Universidad de Buenos Aires (UBA), junto con otras instituciones públicas y privadas, se unen en este reclamo, evidenciando la unidad en la defensa de la educación superior. Además, sindicatos como la Confederación General del Trabajo (CGT) y partidos políticos de la oposición han expresado su respaldo a la causa.
Las dificultades económicas derivadas de la falta de actualización del presupuesto educativo han llevado a situaciones críticas, como la escasez de insumos en las universidades y cortes en servicios básicos, como el suministro eléctrico en la Facultad de Medicina de la UBA.
El ministro de Economía, Luis Caputo, ha minimizado las demandas calificándolas de “berrinche”, mientras que desde el gobierno se señala que la movilización está siendo “incentivada por la política”. Sin embargo, los manifestantes sostienen que su reclamo es genuino y urgente, en vista de la precaria situación financiera que enfrentan las universidades.
Según el rector de la Universidad Nacional del Oeste (UNO), Roberto Gallo, el actual nivel presupuestario solo garantiza el funcionamiento de las instituciones hasta septiembre, lo que subraya la urgencia de una acción inmediata por parte del gobierno para evitar un colapso educativo.
La Marcha Federal Universitaria representa un llamado claro a proteger y fortalecer la universidad pública en Argentina, destacando su papel fundamental en el desarrollo social, cultural y económico del país.