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Rubén Oscar Mühlberger, un conocido esteticista que promocionaba en la televisión supuestos tratamientos médicos para curar enfermedades tales como el Covid19 e incluso el cáncer, fue detenido en medio de un operativo de la Policía de la Ciudad en su clínica de Recoleta.
Mühlberger, que atendía a varios famosos, fue demorado en principio por desobediencia, porque tenía una clínica sin autorización, pero también sería acusado en las próximas horas por ejercicio ilegal de la medicina.
Ante las denuncias que se habían realizado contra el consultorio de estética “Klinik Mühlberger “, efectivos del Departamento Delitos contra las Personas y de la División Delitos contra la Salud realizaron una inspección en el lugar, ubicado en la planta baja del inmueble de la calle Arenales al 1300.
Junto al personal policial concurrieron representantes del Ministerio de Salud de la Nación y se comprobó que el titular del local “se hacía pasar por médico pese a no estar habilitado”; los policías hallaron un sello, con su nombre y una matrícula médica nacional que había vencido en diciembre pasado. En su página él se define como “médico especialista en estética y medicina anti-aging”. Además, pagaba desde hace años espacios en distintos canales para que lo presentaran como un profesional de la salud, lo que en rigor no podía hacer.
En varios canales lo anunciaban como una eminencia médica, aunque ni siquiera se tomaban el trabajo de chequear si realmente era profesional de la salud. Todo tiene una explicación: pagaba muy bien para sentarse delante de una cámara. “Hay varios gerentes que por estas horas deben tener pánico de que les pregunten cuánto y cómo le cobraban”, contó una fuente que conoce del negocio. Y agregó: “hace más de diez años, antes de un primer escándalo que lo llevó a los tribunales, compraba espacios en un canal y hacía su propio programa; lo presentaban como un médico que curaba todo”.
El local, en donde había pacientes esperando ser atendidos, tampoco tenía habilitación, según la información oficial. Además, poseía medicamentos vencidos, con fechas de 2014 y 2015, que comercializaba y “con los que realizaba trabajos invasivos poniendo en riesgo a sus pacientes”. También en el consultorio había médicos de nacionalidad venezolana que no están registrados ni habilitados para ejercer en el país.
La Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Número 11, a cargo de la doctora Valeria Massaglia, procedió a la clausura del local y a la detención del titular de la clínica, imputándole infracciones a los artículos 239 y 106 del Código Penal.
Cuando se desató la pandemia del coronavirus, el “médico” fue invitado a un programa de la tarde del canal América, donde sin más vueltas lo presentaron como alguien que, supuestamente, curaba el Covid19. Pero también, por algunas denuncias, se sabe que decía curar el cáncer, pero en definitiva lo que hacía era vender libros de autoayuda y recetar complejos vitamínicos a familiares de pacientes con esa dura enfermedad.