La semana pasada provocó conmoción en Salta el fallecimiento de un menor de 2 años que, según su mamá, se había ahogado mientras comía. Los médicos notaron algo extraño y dieron aviso a las autoridades. Ahora la mujer está imputada por abandono de persona seguido de muerte.
Según trascendió, el pasado martes 22, Micaela Noemí Colque (23) llevó en brazos a su pequeña hija al centro de Salud de barrio Provipo, diciendo que se había ahogado mientras comía.
Los profesionales que la asistieron indicaron que al llegar, la niña no tenía signos vitales, tenía temperatura corporal baja, presentaba signos de golpes y escoriaciones en el cuerpo, lucía descuidada y de bajo peso para su edad.
En la declaración de la madre de la niña, que inicialmente dijo que se había ahogado con alimentos, surgieron inconsistencias y contradicciones, de lo cual surgió que había dejado a la niña de dos años sola en casa y que al regresar, la encontró con “dificultades para respirar”, por lo que la llevó al centro de Salud y que había mentido para que no pensaran que era “mala madre”
De los testimonios recogidos, se pudo constatar que la mujer había dejado a la menor al resguardo de su abuela paterna y que desde que tenía un año, la recuperó y que no le daba los cuidados y las atenciones necesarias.
En la acusación provisional, el fiscal sostiene que el deceso de la víctima es “el resultado del accionar sistemático de su madre, quien habría expuesto a su hija a una situación de desamparo, en un contexto de desnutrición y deshidratación, sumado a que el día del deceso la dejó sola a su suerte en la vivienda, colocándola en una situación de desprotección y peligro”.
La acusada estuvo acompañada de un defensor oficial en la audiencia de imputación y en su declaración negó su responsabilidad en lo sucedido.
Desde la Fiscalía se solicitó que se mantenga su detención, mientras se cumplen las numerosas diligencias solicitadas para lograr el esclarecimiento del hecho. //Fiscales Penales Salta.