Iván Prein, hijo de un conocido pastor de la iglesia evangélica pentecostal, fue condenado este lunes a 3 años y 8 meses de prisión de cumplimiento efectivo y 10 años de inhabilitación. El hombre fue acusado de atropellar en estado de ebriedad Leticia Allo, cuyas lesiones derivaron en su muerte. El hecho ocurrió el 29 de mayo de 2016.
El juez Javier Esteban de La Fuente además ordenó su detención con el beneficio de la prisión domiciliaria con monitoreo electrónico.
Al leer los argumentos por los que se resolvió la condena, el magistrado explicó que el imputado cometió tres graves infracciones al deber de cuidado: 1) exceso de velocidad: manejaba entre 72 y 90 kilómetros por hora y las condiciones climáticas no eran óptimas 2) 1,1 de alcohol en sangre pero se determinó que al momento del hecho ascendía a 1,35 3) efectuó una maniobra temeraria de forma zigzagueante.
Además ponderó el juez que Prein tras el incidente, se escapó dejando a la víctima tendida en el suelo y la policía lo persiguió y lo detuvo cruzándole el auto porque el imputado no paraba a pesar del juego de luces que le hacían. Por otra parte leyó un párrafo de la declaración de la propia víctima tras el hecho.
El viernes pasado la querella durante sus alegatos había solicitado 5 años (la pena máxima) y que sea de cumplimiento efectivo. Además 10 años de inhabilitación. En tanto la fiscalía pidió 4 años de prisión, e inhabilitación.
Al explicar la pena impuesta el magistrado De la Fuente aseguró que “resulta razonable 3 años y 8 meses y que debido a la actitud del imputado de escaparse al momento del hecho y la solvencia que tiene corresponde la detención efectiva, pero prudente”, por lo que accedió a que sea domiciliaria con tobillera electrónica.
El viernes pasado el Tribunal libró un oficio a migraciones para que el imputado no pueda salir del país y además tuvo que entregar el pasaporte en la fiscalía.
Recordemos que el 29 de mayo de 2016, en la esquina de la avenida Córdoba y Bonpland, en el barrio de Palermo de la Ciudad de Buenos Aires cuando Leticia Allo regresaba de bailar con un grupo de amigos, fue atropellada por Iván Prein, quien conducía un Fiat Punto, con 1,1 gramos de alcohol en sangre.
Al momento de los hechos, el joven que tenía 24 años huyó a toda velocidad y, tras una persecución policial, fue detenido a cuadras del lugar. A las pocas horas, sin embargo, recuperó su libertad.
Seis años después y tras fracasar el acuerdo que ofreció el imputado para declarase culpable en un juicio abreviado con una pena de tres años de cárcel sin cumplimiento efectivo y dinero como resarcimiento, propuesta rechazada por la familia de la joven hizo que todo se dilatara. Ahora y acompañada la familia por las madres del Dolor finalmente el debate llega a su fin, con una pena de cumplimiento efectivo. Tal vez no es la esperable pero al menos podrá cerrar una herida.
Antes de conocer el veredicto MDZ habló con Mónica Pueblas, mamá de Leticia para conocer cuáles eran sus expectativas: “La expectativa es que va ser un fallo ejemplificador ya que hay tantas injusticias, tantas familias que están pasando lo mismo que nosotros y lo que cuesta llegar al juicio. Imagínate que hace seis años que estamos detrás de esto”.