El fiscal que investiga el caso del jubilado Jorge Ríos, quien mató a balazos a uno de los delincuentes que el 17 de julio pasado entró a robar a su casa del partido bonaerense de Quilmes, solicitó esta tarde el cese del arresto domiciliario por considerar que no existen riesgos de que se fugue o entorpezca el proceso, aunque pidió que se procese por homicidio agravado.
Fuentes judiciales informaron a Télam que el pedido fue presentado esta tarde por el fiscal Ariel Rivas al juez de Garantías de Quilmes Martín Nolfi, quien deberá resolver si hace lugar al planteo.
El titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Quilmes consideró que la prisión preventiva debe ser considerada como la “última ratio”, por lo que “deben aplicarse, de ser posible, alternativas menos gravosas”, ya que ello no afecta “la presunción de inocencia”.
En su presentación, el fiscal Rivas también recordó que el juez Nolfi ya le otorgó en su momento el arresto domiciliario “teniendo en cuenta su edad, estado de salud, las lesiones padecidas, su carencia de antecedentes y su arraigo, bastando para ello su promesa jurada, sin necesidad de colocarle una tobillera electrónica para su control por sistema de monitoreo”.
Por ello, y sumado que desde entonces Ríos no demuestra “la voluntad de burlar la acción de la justicia, sino de estar a derecho y someterse al imperio de la ley”, el fiscal entendió que “es posible garantizar el alcance de los fines” del proceso “sin necesidad de que el señor Ríos permanezca detenido en su domicilio”.
Por último, Rivas se remitió al juez para que en ese marco dicte la excarcelación “bajo las condiciones asegurativas” que estime “pertinentes”.
Por su parte, uno de los abogados defensores, Fernando Soto, dijo que da por sentado que el magistrado hará lugar al planteo del fiscal, por lo que celebró que el jubilado “ya está en libertad”.
El fiscal Rivas sostiene que el jubilado, al matar al ladrón, cometió un homicidio agravado.