El cuerpo de Lucas González, el adolescente de 17 años que murió ayer tras ser baleado por efectivos de la Policía de la Ciudad en el barrio porteño de Barracas, eran esta mañana sometidos a la autopsia de rigor en la Morgue Judicial del Cuerpo Médico Forense, tras lo cual será entregado a la familia para que puedan velarlo.
La autopsia, un procedimiento que se realiza en todos los casos de muertes violentas, se lleva adelante desde las 10.30 en la morgue situada en la calle Junín 760 con el fin de determinar científicamente las lesiones de bala que sufrió Lucas en la cabeza que le provocaron la muerte ayer, cuando permanecía internado en el Hospital El Cruce, de Florencio Varela.
Tras su fallecimiento, los padres decidieron donar sus órganos, por lo que el cuerpo de Lucas fue primero sometido a una ablación.
El estudio forense fue ordenado por el juez de Menores 4 Alejandro Rodolfo Cilleruelo antes de sobreseer en la causa a los tres adolescentes que estaban con Lucas y declararse incompetente para seguir en la pesquisa por no haber menores de edad involucrados. //Télam